Muebles que encuentran su sitio

  
   En más de una ocasión os he comentado las anécdotas que esconden cada una de las piezas exclusivas que forman la colección decorativa de Lagasca Vintage Backstage. Todas tienen una historia detrás, pero también vuelven a reescribirla una vez salen de nuestra tienda. Y con algunas de ellas también podéis ser partícipes de esos nuevos recuerdos. Hoy comienzo una serie de posts con los muebles de Lagasca que ya son parte de la decoración de otras tiendas y establecimientos de restauración de la ciudad pontevedresa. Y me gusta hacerlo con esta mesa de fábrica que escogió la dueña de El Baúl de Veva, Fani Ruiz, para decorar su preciosa tienda de ropa infantil en las galerías de la Oliva.

    Esta mesa con la que Fani ha querido decorar uno de los rincones más especiales de la tienda viene de Lisboa y posiblemente haya tenido un uso industrial como base para la elaboración de productos de cerámica. No cuesta imaginarla con esa utilidad, aunque ahora ha revivido como muestrario de las magníficas prendas infantiles que El Baúl de Veva ofrece a sus clientes desde hace ya catorce años. Podéis conocer estas especiales colecciones a través de las redes sociales (Facebook e Instagram) en las que el establecimiento no solo muestra sus preciosas prendas, sino también lo bien que les sientan a sus pequeños clientes. Los últimos viernes de cada mes, además, es posible hacerse con ellas a precios muy rebajados en el mercadillo que Fani realiza a las puertas de la tienda.

   En su establecimiento encontraréis todo tipo de prendas para vuestros hijos con marcas tan elegantes como Theo y Olivia, No sin Valentina o Bonnet à Pompon por citar solo algunas.

   Como podéis apreciar, la mesa se integra perfectamente en el ambiente infantil de El Baúl de Veva y en Lagasca estamos encantadas de que Fani Ruiz haya elegido esta pieza.

   Como lo estamos también al conocer cómo ha encajado esta otra mesa, creación de Mercedes Escauriaza y Mercedes García-Nieto, las propietarias de Lagasca Vintage, en su nuevo destino, en este caso un domicilio particular. De esta mesa ya os hablé en uno de mis primeros posts, ya que daba vida a uno de nuestros primeros escaparates en Manuel Quiroga, 17. Las dueñas de Lagasca la rediseñaron a partir de una antigua caseta de animales de granja de los años 40, que llega también desde Lisboa. Se mantuvo su inconfundible alambre y después de su restauración, se añadió un cristal a medida para aportar un aire moderno y la calidez necesaria a fin de trasladarlo a una vivienda del siglo XXI.
   En cada uno de sus nuevos espacios, estas mesas han encontrado su sitio y pronto atesorarán todo un baúl de recuerdos. ¿Quieres el tuyo?

ALI M.